Así se crean las vajillas de los mejores chefs del mundo

Pisar el taller de Luesma & Vega es pisar el templo sagrado de las vajillas para gastronomía de vanguardia. Y hablamos casi en sentido literal: el taller se encuentra en un edificio que simula ser la iglesia del Poble Español de Barcelona.

No es de extrañar que ese imponente taller de altas paredes sea un nido de creatividad donde se han diseñado las vajillas que acompañan las creaciones de los chefs más alabados del momento. Y es que el lugar inspira. Y mucho. Pero el equipo de Luesma & Vega sabe que la creatividad no llega sola e intenta aplicar siempre la ya más que conocida frase de Pablo Picasso, “cuando llegue la inspiración, que nos encuentre trabajando”.
Y es que, desde que en 2004 empezaron su colaboración con el Bulli, Luesma & Vega no han parado de trabajar, llegando a desarrollar piezas y colecciones para restaurantes y chefs como El Celler de Can Roca, DiverXO, Mugaritz, Albert Adrià, Paco Pérez o Hideki Matsuhisa.

Para poder atender a toda la cantidad de trabajo, Ester Luesma, cofundadora de la empresa junto a Xavier Vega, llega al taller cuando media Barcelona aún bosteza entre las sábanas. Es la primera en entrar y aprovecha para preparar la jornada del día sin que el teléfono la interrumpa.

Una hora más tarde empieza a llegar el resto del equipo. Xavier Vega se encarga de realizar prototipos, moldes y también lleva a cabo todo el trabajo de creatividad, desarrollo y fotografía. Natalia López y Eduardo Nieto, jefes de producción, coordinan con Ester la producción del día y se ponen a trabajar: cortan vidrio, preparan los hornos y coordinan al resto del equipo. Javier Vidal es el encargado de los acabados en frío, el pulido y preparado de las piezas antes y después de salir del horno. Zakarias Khali trabaja junto a él realizando preparaciones antes de hornear. Stelyos Bovis es una figura polivalente y ayuda a todo el equipo, manteniendo en condiciones el taller, haciendo de auxiliante, montando paquetes y atendiendo en la tienda que complemente el taller.

Xavier cuenta que todos los diseños que se llevan a cabo en el taller son solo posibles gracias a un previo trabajo creativo: Ester y Xavi llevan siempre encima una libreta de bolsillo que contiene todas las ideas que pasan por su cabeza a lo largo del día. Y es que no sólo en el taller se trabaja. Xavi nos comenta que aplican a menudo la teoría de las tres B: Bed, Bathroom y Bus. Es decir, que el equipo se inspira realizando cualquier acción cotidiana, ya sea en la cama, en el baño o viajando en transporte público.

Luesma & Vega diferencia su proceso creativo en dos amplios bloques, que a la larga pueden entremezclarse entre sí. El primero son las demandas externas de los clientes (como Andoni Luis Aduriz, Hideki Matsuhisa, Astrid Gutsche o Eneko Atxa), que exponen sus necesidades y los requisitos que debe cumplir el diseño. El segundo bloque está compuesto por todas aquellas cosas o ideas que inspiran al equipo creativo de Luesma & Vega, que van directamente a la libreta de bolsillo. Estas ideas pueden terminar materializandose en alguno de los proyectos o pueden no desarrollarse nunca, aunque siempre es muy interesante mezclarlas y compararlas con las demandas de los clientes porque éstas están formadas por inputs externos, por otras necesidades y ocurrencias que enriquecen la idea final.

Xavier nos comenta que “para ser lo más eficaces posible hay que estar atentos a los errores, porque lo inesperado siempre abre nuevas vías”. Una de las máximas del taller es “todo defecto es un efecto”, y es que algunos diseños y acabados novedosos son producto de errores que bien controlados formalizan una innovación que no sería posible cuando se controla tanto la técnica y el proceso. En definitiva, se trata de volver a ser novato, niño, aprender a preguntarse cosas que nos parecerían absurdas y estar atentos para ver la potencialidad de un error. Llevar al detalle todos los vaivenes creativos hace que la productividad en Luesma & Vega sea altísima. En el transcurso del día, los creativos del taller aprovechan los huecos que quedan libres en las horneadas para realizar pruebas, así se consigue ahorrar energía y experimentar, a la vez que se hornean piezas ya finalizadas.

Pasar una jornada en el taller de Luesma & Vega nos muestra la creatividad, elaboración y trabajo que se esconde detrás de los elementos estéticos que forman parte de las experiencias gastronómicas de los restaurantes de vanguardia. La fusión entre las necesidades de los grandes chefs y las mentes creativas de Luesma & Vega resulta en la creación de vajillas originales y funcionales que deleitan a los amantes de la gastronomía. Es la unión entre estas vajillas y la elaboración culinaria del chef que da lugar a la obra total que conforma la experiencia última.







Realmente quiero felicitarlos porr su trabajo.
Realmente excepcional.
Millones de gracias, María 😉 ¡Que pases un gran día!